25 Versículos Bíblicos de Consuelo para Enfrentar la Muerte de un Ser Querido o el Sufrimiento

Los momentos de sufrimiento y dolor llegan sin avisar y pueden causar, no solo dolor sino otro tipo de sentimientos que pueden llevar a una persona a cometer errores que le conduzcan a una situación aún peor.

Es precisamente en estos momentos cuando el ser humano está más propenso a recibir consuelo, y qué mejor si ese consuelo viene de la palabra de Dios.

Ya sea que el sufrimiento sea causado por la pérdida de un ser querido o, sin siquiera llegar a ese extremo, por cualquier circunstancia que cause dolor en el interior de una persona, es importante que esa persona sepa que no se encuentra sola, que precisamente en esos momentos de dolor es cuando Dios está más cerca e incluso sufre con nosotros y siente nuestro dolor.

La Biblia está llena de promesas que llenan de aliento el alma de un ser afligido, y esas promesas son la llave que conducen a la curación y restauración de un corazón roto, es por ello que a continuación hemos reunido 25 versículos bíblicos de consuelo para afrontar la pérdida de un ser querido o cualquier tipo de sufrimiento.

Cada versículo viene acompañado de una imagen para poder compartirla con esas personas que apreciamos y que están sufriendo. Después de todo, ¿qué es el evangelio sino buenas noticias desde lo alto?.

1 Corintios 1:3-4

Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo derramen en ustedes su amor y su paz. No ceso de dar gracias a Dios que les concedió su amor por medio de Cristo

1 Tesalonicenses 4:13

Hermanos, no queremos que ignoren lo que pasa con los que mueren, para que no se pongan tristes como esos otros que no tienen esperanza

2 Corintios 1:3-4

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios que siempre nos da consuelo. Dios nos consuela en todos nuestros sufrimientos para que también nosotros podamos consolar a quienes sufren, dándoles el mismo consuelo que recibimos de él

Apocalipsis 21:4

Él secará todas sus lágrimas, y ya no habrá muerte ni sufrimiento, ni llanto, ni dolor, porque el mundo que existía antes ya desapareció

Exodo 3:7

He visto los profundos sufrimientos de mi pueblo en Egipto (le dijo el Señor), y he oído sus oraciones en que piden liberación de sus duros capataces

Isaías 41:10

No temas, estoy contigo. Yo soy tu Dios, no tengas miedo. Te fortaleceré, sí, te ayudaré. Te salvaré con mi mano victoriosa

Jeremías 31:13

…porque transformaré su aflicción en gozo, los confortaré y los haré alegrarse, porque el cautiverio con todos sus dolores quedará atrás

Juan 14:1-3

No se angustien. Confíen en Dios, y confíen también en mí. 2 En la casa de mi Padre hay muchas viviendas; si no fuera así, no les habría dicho que voy a prepararles un lugar. 3 Y si me voy a prepararles un lugar, volveré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde yo esté

Isaías 49:13

…porque el Señor ha consolado a su pueblo y tendrá compasión de su dolor

Juan 14:18

No los voy a dejar huérfanos; volveré a estar con ustedes

Juan 14:27

Les dejo la paz, les doy mi paz; pero no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni tengan miedo

Lamentaciones 3:31-33

Pues el Señor no abandona a nadie para siempre. Aunque trae dolor, también muestra compasión debido a la grandeza de su amor inagotable. Pues él no se complace en herir a la gente o en causarles dolor

Juan 16:33

Yo les he dicho estas cosas para que en mí encuentren paz. En este mundo van a sufrir, pero anímense, yo he vencido al mundo

Romanos 8:18

Considero que los sufrimientos del tiempo presente no son nada si los comparamos con la gloria que habremos de ver después

Mateo 5:4

Dios bendice a los que sufren, pues él los consolará

Salmos 25:16-18

Ven, Señor, y muéstrame tu misericordia, pues me hallo indefenso, abrumado, sumido en la tribulación. 17 De mal en peor van mis problemas, ¡ay, líbrame de ellos! 18 Siente mis dolores; fíjate en mis angustias; perdona mis pecados

Salmos 22:25

Porque no ha desdeñado mi clamor ni mi profunda desesperación; no me ha vuelto la espalda ni se ha alejado. Cuando clamé a él, me escuchó y acudió

Salmos 23:4

Aun cuando atraviese el negro valle de la muerte, no tendré miedo, pues tú irás siempre muy junto a mí. Tu vara de pastor y tu cayado me protegen y me dan seguridad

Salmos 30:5

Un instante dura su ira; su gracia perdura de por vida. Las lágrimas pueden huir la noche entera, pero al amanecer habrá gozo

Salmos 31:9

¡Señor, apiádate de mí en mi angustia! Tengo los ojos enrojecidos de llorar; el dolor ha quebrantado mi salud

Salmos 34:18

El Señor está cerca de los que tienen el corazón quebrantado; libra a los de espíritu abatido

Salmos 73:26

Aunque mi corazón y mi cuerpo desfallezcan, mi refugio y mi heredad por siempre es Dios

Salmos 46:1

Dios es nuestro amparo y nuestra fuerza, nuestra pronta ayuda en tiempos de tribulación

Salmos 119:49-50

Tus promesas me dan esperanza; ¡no te olvides de ellas! Tus promesas me dan vida; me consuelan en mi dolor

Salmos 147:3

Él sana a los quebrantados de corazón y les venda las heridas